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Esto dependerá mucho del supuesto legal que hayas acreditado para obtener tu residencia. Las regulaciones migratorias distinguen principalmente entre dos residencias que permiten el empleo desde su Inicio :

Residencia Temporal con Permiso para Trabajar: Esta se concede cuando la residencia se originó por una oferta de trabajo y el empleador posee la Constancia de Inscripción de Empleador, que es el documento necesario para contratar trabajadores extranjeros en México.

Residencia Permanente: Los titulares de este tipo de residencia pueden trabajar en México sin requerimientos adicionales, facilitando la integración en el mercado laboral local.

Si tienes otro tipo de residencia temporal y tu documento migratorio no tiene la leyenda “permiso para trabajar”, es necesario solicitar un permiso de trabajo. Este se puede obtener de dos maneras:

Mediante una Oferta de Trabajo: Deberás asegurarte de que tu empleador cumpla con todos los requisitos migratorios, incluyendo la mencionada Constancia de Inscripción de Empleador.

Como Trabajador Independiente: Es indispensable estar registrado en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) para cumplir con las obligaciones fiscales que esto implica, un paso crucial para la autorización de tu actividad laboral en México.

Entender y seguir estos lineamientos te asegurará estar en regla con las leyes migratorias y fiscales de México, permitiéndote trabajar legalmente y sin complicaciones en el país.

 Obtener la residencia en México ofrece numerosas ventajas si planeas vivir en el país por más de 180 días. Algunos de los principales beneficios incluyen:

• Acceso a la CURP (Clave Única de Registro de Población): Este documento es esencial para realizar diversos trámites administrativos en México.
• Facilidades Bancarias: Con tu CURP podrás abrir cuentas bancarias, lo que facilita la gestión de tus finanzas personales en México.
• Arrendamiento de Propiedades: Tener residencia proporciona mayor confianza y credibilidad ante los propietarios, facilitando el proceso de alquiler de viviendas.
• Permiso de Trabajo: La residencia permite solicitar y obtener un permiso de trabajo, esencial para emplearte legalmente en México.
• Licencia de Conducir: Como residente, podrás tramitar tu licencia de conducir mexicana, lo que te permitirá conducir legalmente en el país.
• Movilidad Internacional: Podrás entrar y salir de México sin necesidad de presentar un vuelo de salida, y con menos cuestionamientos en los filtros de migración.
• Reunificación Familiar: Tienes el derecho de tramitar la residencia para tu familia, lo que facilita la preservación de la unidad familiar en territorio mexicano.
• Uso de Vehículos Extranjeros: Como residente, puedes utilizar un vehículo extranjero en México bajo ciertas condiciones.

 Estos beneficios no solo facilitan tu integración y vida diaria en México, sino que también te proporcionan seguridad jurídica y tranquilidad durante tu estancia en el país.

Derecho al Voto: Como ciudadano mexicano, tendrás el derecho a votar en elecciones locales y nacionales, participando activamente en la vida política del país.

 Menos Trámites Burocráticos: Al naturalizarte, eliminas la necesidad de notificar a la autoridad migratoria sobre cambios de domicilio, estado civil, nombre, nacionalidad o empleo. También te liberas de ciertas restricciones en la compra de inmuebles en zonas fronterizas o costeras sin necesidad de fideicomiso y sin requerir permiso de la Secretaría de Relaciones Exteriores para adquirir propiedades en cualquier parte del país.

 Libertad para Expresar Opiniones Políticas: La Constitución mexicana limita la participación de los extranjeros en asuntos políticos. Como ciudadano, puedes expresar libremente tus opiniones políticas sin temor a repercusiones legales.

 Facilidad de Movimiento en Fronteras: Experimentarás un proceso más ágil en los filtros de migración al entrar a México, ahorrando tiempo y evitando procedimientos extensos.

 Acceso a Empleo sin Restricciones: Podrás trabajar para cualquier empresa sin que esta necesite un permiso especial para contratar extranjeros.

 Beneficios del Pasaporte Mexicano: Dependiendo de tu pasaporte actual, el pasaporte mexicano puede ofrecer acceso sin visa a más países, como se refleja en su posición en el Índice de Pasaportes Henley.

 Simplificación en la Reposición de Documentos: A diferencia de los residentes, que deben portar siempre su tarjeta y enfrentar procesos complejos para reemplazarla en caso de pérdida o robo, los ciudadanos pueden usar una variedad de documentos para identificarse, como la licencia de conducir local, que son más fáciles de reemplazar.

Compra de propiedades sin restricción: Además, como ciudadano mexicano, te liberas de ciertas restricciones legales al comprar inmuebles en zonas estratégicas. No necesitas establecer un fideicomiso para adquirir propiedades en zonas fronterizas o costeras, y tampoco requieres permiso de la Secretaría de Relaciones Exteriores para comprar propiedades en otras áreas del país. Esta libertad amplía tus opciones de inversión y residencia dentro de México.

 Si no reportas a tiempo los cambios requeridos al Instituto Nacional de Migración, como cambios de domicilio, estado civil, o empleo, podrías enfrentarte a sanciones económicas. Para el año 2024, las multas por no realizar estas notificaciones oscilan entre $4,148.80 y $20,744 MXN, dependiendo de la gravedad y la naturaleza del incumplimiento. Es crucial mantener actualizada tu información con las autoridades migratorias para evitar estas penalizaciones y asegurar tu estatus legal en México.

 No necesariamente, recuerda que como extranjero sólo podrás trabajar para aquellos empleadores que cuenten con Constancia de Inscripción de Empleador que es el documento que concede el Instituto Nacional de Migración para poder contratar extranjeros, y si obtuviste tu permiso de trabajo como trabajador independiente, deberás notificarle a migración el cambio en tu actividad laboral.

 No necesariamente. Si eres extranjero con permiso de trabajo en México, tu capacidad para trabajar está condicionada a ciertos requisitos. Solo puedes trabajar para empleadores que posean una Constancia de Inscripción de Empleador, un documento emitido por el Instituto Nacional de Migración que autoriza a las empresas a contratar trabajadores extranjeros. Además, si obtuviste tu permiso de trabajo como trabajador independiente, es importante notificar cualquier cambio en tu actividad laboral a la autoridad migratoria.

 Según la Ley de Migración mexicana, no existe un tiempo máximo estipulado para que los residentes puedan estar fuera del país que resulte en la pérdida automática de la residencia. Sin embargo, si tienes interés en adquirir la ciudadanía mexicana, debes prestar atención a tu tiempo fuera del país. Para ser elegible para la naturalización, no debes haber estado fuera de México por más de 180 días acumulados durante los dos años previos a la fecha de tu solicitud de ciudadanía. Es importante mantener un registro de tus entradas y salidas para asegurar que cumples con estos requisitos si deseas convertirte en ciudadano mexicano.

 Como residente en México, es crucial que siempre lleves contigo tu documento migratorio válido para acreditar tu estatus. Al entrar y salir de México por los filtros de migración, debes presentar tanto tu pasaporte como tu tarjeta de residencia. Aunque en la práctica es común que al salir del país no se pase por el filtro de migración y, por ende, no se selle el pasaporte, esto puede complicar procedimientos futuros, especialmente si estás considerando solicitar la ciudadanía mexicana. Es importante asegurarte de que tu pasaporte sea sellado al entrar y salir del país para evitar problemas al tramitar la naturalización.

 Además, como residente, no estás obligado a contar con un vuelo de salida de México. Esto se debe a que se entiende que vives en el país y no es necesario probar una fecha de salida.

 No es posible, durante la pandemia por el COVID 19, se emitido un acuerdo por el Gobierno Federal en que se permitía extender por 180 días más la estancia de visitante, pero esto fue aprobado por causas de interés público, y ayuda humanitaria aquellas personas que se tuvieron que quedar en México por causas extrañas a ellos.

Pero al día de hoy no es posible extender una estancia de visitante (turista), pero si tu intención a residir en México, de acuerdo a tu caso en concreto podrías aplicar a una residencia sin la necesidad de salir del país.

• Acude al Consulado Mexicano más cercano: Lo primero que debes hacer es solicitar una “visa de reposición” en el consulado mexicano más cercano a tu ubicación. Esta visa te permite reingresar a México legalmente tras el extravío de tu tarjeta.
• Regresa a México con tu visa de reposición: Una vez que tengas la visa, puedes volver a México. Esta visa sirve para que puedas entrar al país sin problemas en la frontera o el aeropuerto.
• Visita la oficina de migración local: Una vez en México, dirígete a la oficina de migración correspondiente a tu domicilio para formalizar la solicitud de una nueva tarjeta de residencia. Necesitarás presentar la visa de reposición junto con otros documentos que te soliciten, que podrían incluir identificación adicional y pruebas de tu residencia legal previa. Además, deberás realizar un pago de derechos de $1,640 MXN (vigente para el año 2024) para el trámite de reposición.

Si extravías tu tarjeta dentro de México:

• Dirígete a la oficina de migración más cercana: Sin necesidad de otros trámites previos, puedes ir directamente a la oficina de migración más próxima para reportar el extravío y tramitar la reposición de tu tarjeta de residencia. Deberás llevar identificación y, si es posible, una copia de la tarjeta extraviada o cualquier otro documento que acredite tu estatus migratorio. También se requiere el pago de derechos de $1,640 MXN (vigente para el año 2024) para procesar la reposición.

Si perdiste tu tarjeta fuera de México y no obtuviste una visa de reposición antes de regresar:

• Informa inmediatamente al entrar a México: Al llegar a México, comunica a las autoridades migratorias en el punto de entrada sobre tu situación. Es crucial hacerlo antes de pasar por el control migratorio.
• Acta de comparecencia: Las autoridades migratorias pueden levantar un acta de comparecencia, que te servirá para justificar la ausencia de tu tarjeta al acudir a la oficina de migración.
• Reposición de la tarjeta en la oficina de migración: Con el acta de comparecencia y la documentación necesaria, procede a solicitar una nueva tarjeta en la oficina de migración que corresponda a tu domicilio. Recuerda que deberás abonar el pago de derechos de $1,640 MXN (vigente para el año 2024) durante el trámite.

En todos los casos, es aconsejable mantener copias digitales o físicas de tu tarjeta de residencia y otros documentos importantes para facilitar estos trámites. Además, consultar con un experto en migración puede ayudarte a asegurar que el proceso se maneje correctamente y sin demoras innecesarias.